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4.2.1. Adultocentrismo en la práctica docente versus resistencia estudiantil.

  A partir de los planteamientos de Freire y su Pedagogía del Oprimido, se plantea también la pedagogía crítica como un camino alternativo frente a la opresión internalizada por estudiantes y docentes la cual les lleva a oprimir o ser oprimidas/os. Este camino implica la toma de conciencia acerca de esas relaciones de poder y la transformación de su realidad. La resistencia estudiantiles es una de las prácticas empleadas por las y los estudiantes, en el ámbito escolar, para expresar su malestar, sus propuestas, aportes o subjetividades. Siguiendo a Freud y a Habermas, el concepto de resistencia “alude a una manera de reaccionar ante situaciones de opresión, a partir de la conciencia que tenemos de nuestras necesidades” (D´Antoni, Gómez, Gómezy Soto, 2010, p. 14).Esta forma de reaccionar a pesar de no ser siempre estructurada y de tener elementos inconscientes, puede contener otros saludables y rescatables.

A partir de sus observaciones en el aula, D´Antoni, Gómez, Gómez, y Soto (2010) identifican rituales, acciones, roles  o prácticas asumidas y representadas por las y los estudiantes a fin de intentar desestructurar el orden opresivo. Algunos de estos rituales son: 1) “el payaso” de la clase, capaz de detectar y poner en ridículo los rituales sagrados del aula (prácticas cotidianas propias del sistema educativo y la docencia: pasar lista, hacer la oración, cantar el himno nacional, levantarse del asiento para saludar a las autoridades, etc.).Se produce un boicot al status quo institucional. La herramienta del humor, el doble sentido, la charlatanería es ampliamente utilizada por las y los estudiantes cuando el o la docente aborda de manera tradicional, con timidez o indiferencia la temática de la sexualidad, impidiendo un abordaje integral y significativo del tema. 2) “grama social”, compuesta por la “haraganería”, intentos de prolongar el recreo, descansos, espacio de deportes, espacios de discusión no académica. Por ejemplo, en una clase en la que se aborda la sexualidad pueden intentar hacer preguntas redundantes o acerca de aspectos simples a fin de alargar el espacio y no tener que entrar al espacio formal y tradicional de clases.

Las formas de resistencia estudiantil han sido históricamente confrontadas con más opresión que en lugar de producir un cambio, genera nuevas y cada vez más creativas formas de resistir. Se abordó en secciones anteriores la relación entre el cuerpo, la subjetividad y la sexualidad, es por esto que el cuerpo y las expresiones de la sexualidad se constituyen también en “campos de batalla” en los centros educativos.

Reflexión 9

9. Reflexiona y comparte en el foro:

  1. ¿Cómo se manifiestan las resistencias estudiantiles en la práctica educativa en el centro educativo donde labora?
  2. ¿Las prácticas de resistencia estudiantil generan alguna disrupción del status quo escolar?
  3. ¿Se podría pensar en procesos de subjetivación por parte de la población estudiantil, inherentes a las prácticas de resistencia?
  4. ¿De qué forma se relacionan las prácticas de resistencia al sistema educativo y a la dinámica institucional?
  5. ¿Qué significado se les otorga a las prácticas de resistencia en el entorno escolar?
  6. ¿Cuáles prácticas de resistencia estudiantil vinculadas a expresiones de la sexualidad es posible identificar en el entorno escolar?

Puntaje: 5 puntos